A lo largo del tiempo, la cosas van cambiando.
Algunas tienen transformaciones e intentan dejar alguna huella de lo que fue antes, como es el caso del Cine Esperanza, que estaba en la actual esquina de Presidente Carranza y Provada de Francisco Sosa.
El edificio actual muestra una placa con una imagen de aquel cine, en donde Agustín Lara llegó a tocar el piano para dar acompañamiento musical a las películas o para amenizar antes de alguna función.
Pero hay cambios que se hacen con dolo, por robo o por mera destrucción, por meros actos de vandalismo.
En este caso, y en pocoso años, se ha podido atestiguar la perdida de ese patrimonio que en forma de placa o de busto, deja sin memoria aquel homenaje que alguna vez se llevó a cabo.
Así podemos contar a la placa de un árbol o al busto del cronista de Coyoacán Francisco Sosa.